viernes, 12 de enero de 2007

021

 
Si verdaderamente la escritura es neutra, si el lenguaje, 
en vez de ser un acto molesto e indomable, alcanza el 
estado de una ecuación pura sin más espesor que un 
álgebra frente al hueco del hombre, entonces la Literatura 
está vencida, la problemática humana descubierta y 
entregada sin color, el escritor es sin vueltas, un hombre 
honesto. Por desgracia, nada es más infiel que una 
escritura blanca; los automatismos se elaboran en el 
mismo lugar donde se encontraba anteriormente una 
libertad, una red de formas endurecidas limita cada vez 
más el frescor primitivo del discurso, una escritura 
renace en lugar de un lenguaje indefinido.

 

<<<

No hay comentarios.: